El Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Albacete ha explicado que la decisión de trasladar la Unidad de Padrón y Atención Ciudadana a la planta baja del Museo Municipal se ha adoptado porque los informes de los servicios técnicos municipales han señalado este lugar como el más idóneo para albergar temporalmente este servicio, dado que ante la situación de pandemia por el Covid-19, urge buscar un espacio donde trabajadores y ciudadanos puedan mantener las distancias de seguridad para prevenir contagios, tal y como recomienda la autoridad sanitaria.
En el transcurso del debate suscitado por una moción presentada por el PP sobre esta cuestión, el alcalde, Vicente Casañ, ha indicado que no le hubiera gustado llegar a tener que tomar esta decisión, pero “no había otra alternativa, por economía y por tiempo, ésta era la única opción”. El regidor ha desvelado que mantuvo conversaciones con otras administraciones, la Diputación de Albacete y el Gobierno de España, en la búsqueda de otros espacios, pero finalmente los técnicos se decantaron por este lugar.
Casañ ha insistido en la provisionalidad de esta ubicación y dado que es una solución temporal y en aras a la correcta administración del dinero público, opinó que no era conveniente invertir un dinero que no se tiene en una solución temporal, “la previsión de ingresos de este Ayuntamiento ha caído en 10 millones de euros a causa de la pandemia, tenemos que mirar cada céntimo que gastamos con lupa”.
Con todo, el alcalde ha mostrado la comprensión del malestar que esta decisión ha creado entre los artistas locales, a quienes trasladó su palabra de la temporalidad de esta decisión, “todos estamos apenados de no poder disfrutar por unos meses de esta planta baja para exposiciones”. No obstante, apuntó que mientras no se pueda utilizar la planta baja del Museo Municipal, habrá que potenciar otros lugares de exposición al aire libre, -“ahora, cuantas menos aglomeraciones en espacios interiores, mejor”, acotó- y utilizar para exposiciones el resto de plantas de este edificio.
Otras alternativas estudiadas
Por su parte, el concejal de Obras e Infraestructuras, Arturo Gotor, ha explicado que el problema de la falta de espacio en el Registro Municipal, que se sitúa en la planta baja de la Casa Consistorial, no es nuevo, si bien ha sido ahora a raíz de esta situación de emergencia sanitaria que ha producido centenares de muertos en la ciudad, cuando se ha planteado la urgencia de darle una solución. Era necesario “esponjarlos” y con este planteamiento se pidió a los técnicos del Servicio de Arquitectura que estudiaran las alternativas posibles, bajo los criterios de funcionalidad, conectividad con la red informática municipal, proximidad, rapidez y economía. “Se han inspeccionado bibliotecas, incluso el claustro de la Asunción, centros socioculturales, todo con tal de no ir al Museo Municipal, pero las otras alternativas posibles eran demasiado costosas”, ha recalcado el concejal.
Entre otros lugares, los técnicos han estudiado seis centros socioculturales, bibliotecas, el local de la Sección de Empleo y Formación, la Casa de la Cultura José Saramago, el Mercado de Carretas y la Posada del Rosario.
“La decisión no se ha tomado en base a opiniones políticas, hemos pedido informes técnicos y les hemos hecho caso, decantándonos por la opción óptima, en base al poco tiempo que tenemos; a razones de economía y a la funcionalidad y dignidad que requieren los ciudadanos a los que tenemos que atender y los trabajadores municipales”, ha recalcado el concejal de Obras.
En todo caso, ha detallado que el Registro Municipal y de Atención al Ciudadano que se habilitarán en este lugar, ocuparán solo 430 metros cuadrados de la planta baja, el resto de este lugar donde se sitúan los despachos del Servicio de Cultura y Festejos mantendrán su utilidad, igual que las dos plantas superiores. Así, explicó, la entrada principal que da acceso a la escalera imperial se mantendrá como acceso al Museo Municipal, que mantiene los 400 metros cuadrados de la planta primera y la segunda con uso cultural; mientras que el acceso al Registro se hará por la puerta de emergencia que da al Paseo de la Libertad, por tanto, se podrán habilitar dos circuitos diferentes para una y otra función. Además, se instalará un sistema de cita previa con el propósito de evitar largas colas y en caso de que surgieran se trazará un circuito en el Paseo de la Libertad para que los ciudadanos que aguarden a ser atendidos tengan la amplitud necesaria que exige esta situación.
En este sentido, la concejala de Hacienda y Personal, María José López, ha pedido que no se obviara el contexto en el que se adopta esta decisión, como es una pandemia y ha pedido que no se olvide que es una solución “temporal y provisional”.
Respeto a la Cultura y a la dignidad de los ciudadanos
La edil ha recalcado que se está buscando una solución definitiva para el Registro Municipal, pero ante la emergencia sanitaria se ha hecho necesario buscar con urgencia una ubicación con espacio suficiente para poder atender a las 300 personas que a diario acuden a hacer trámites al Ayuntamiento de Albacete. “No estamos hablando solo de poner un sello en un papel, sino de tener un espacio que se pudiera conectar a la red informática municipal y que cumpliese la normativa de prevención de riesgos laborales y las indicaciones que nos da la autoridad sanitaria”, ha recalcado la concejala de Hacienda.
“Hemos hecho lo que creemos mejor para la ciudad, desde el más profundo respeto a la Cultura que nos hace iguales y a la dignidad de todos los ciudadanos a los que tenemos que atender”, ha manifestado Maria José López.