El alcalde de Albacete, Vicente Casañ, ha anunciado que el Consistorio está rediseñando el presupuesto municipal estudiando «partida a partida» ya que «los recursos son limitados y los ingresos también» debido a la situación generada por el COVID-19, que va a llevar a crear además una oficina de atención a empresarios y trabajadores que se hayan visto «afectados».
De esta manera, Casañ ha explicado que ha solicitado al Gobierno de España «flexibilidad» para que se puedan utilizar en gasto corriente los 5,7 millones de euros de superávit que el Ayuntamiento obtuvo el pasado año, y ha asegurado que el presupuesto estará pensado en el «beneficio» de la sociedad y «en los ciudadanos, trabajadores y empresarios».
Ha avanzado que la próxima semana la Junta de Portavoces «tendrá su boceto con todas las cautelas del mundo», ya que la tesis es «hacer las cosas bien».
En relación a la oficina de atención, ha manifestado que el motivo de su creación es que los empresarios afectados por el COVID-19 van a necesitar el «calor de los trabajadores», por lo que esta iniciativa va a ser una forma de «reactivar» la ciudad de Albacete.
«EL DÍA DE DESPUÉS» DEL LEVANTAMIENTO DEL ESTADO DE ALARMA
En rueda de prensa por videoconferencia ha explicado que se van a «articular» medidas para reactivar la ciudad de Albacete y para ello ha garantizado que ya hay «bastantes propuestas de reactivación» sobre la mesa.
Unas medidas que ha calificado como «razonables», y que van a estar destinadas a ayudar a quienes «más lo necesitan», por lo que espera que estén «cuanto antes» y de la forma «más pactada posible» con la Junta de Portavoces.
Y es que, ha considerado que cuando se produzca el levantamiento del estado de alarma, se van a tomar decisiones «importantes» y todas ellas, estudiadas y analizadas en «consenso» con el objeto de encontrar un «equilibrio», ya que, a pesar de que considera que «nada es más grave que lo que estamos pasando ahora», augura que se avecinan «tiempos duros».
«HAY QUE DEJAR DE LADO EL POSTUREO FOTOGRÁFICO»
Vicente Casañ ha asegurado que en estos momentos de crisis sanitaria la labor es la de «gestionar y dejar de lado el postureo fotográfico», al tiempo que ha celebrado que el Gobierno de la ciudad haya contado con el apoyo de todos los partidos políticos y se hayan dedicado a trabajar por el «bienestar y la salud» de los ciudadanos.
Asimismo, ha reflexionado y asegurado que «posiblemente» el Ayuntamiento podría haber actuado «mejor» pero en la posición en la que se encuentran los ayuntamientos actualmente, se ha «pedido y exigido» siempre por el bien de la ciudad.
Además, ha manifestado que han aportado y «facilitado» su ayuda y colaboración a quienes «más lo demandaban» como ha sido el Cotolengo y el Asilo San Antón quien demandaba con «urgencia» equipos de protección, y actualmente la situación en ambos sitios está «muy bien».
De esta manera, ha querido aclarar que, desde el Ayuntamiento se solicitó la asistencia de la Unidad de Emergencia Militar ya que se consideraba una «óptima opción», pero ha manifestado que la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha «no lo vio necesario».
CASAÑ PIDE QUE NO HAYA MÁS RETRASOS
Por último, el primer edil ha asegurado que desde el Ayuntamiento de Albacete se ha pedido al Gobierno central y regional «bienes, material y equipos sanitarios» y aunque reconoce que «no es fácil», les ha insistido, pues «es vital y crucial» para el bienestar de Albacete, por lo que ha pedido que «no hayan más retrasos».
Así, ha asegurado que la «agilidad, transparencia y rigor» son fundamentales en estos momentos y ha manifestado que incluso las estadísticas «no refleja la dimensión de la pandemia».
Por último, a pregunta de los medios sobre la Feria de Albacete 2020, ha respondido que «por respeto» no toca hablar de ello por la crisis que se está viviendo y porque actualmente la ciudad se encuentra declarada en luto oficial.