El Ministerio de Fomento ha iniciado el proceso de ‘rescate’ de la autopista AP-41 Madrid-Toledo, la última de las nueve vías de pago que quebraron durante la crisis que le quedaba por asumir.
El ‘rescate’ comienza con la aprobación este viernes en Consejo de Ministros de la resolución del contrato con la actual sociedad concesionaria de la vía, tras ser declarada en liquidación.
La rescisión del contrato se ha acordado tras un proceso que ha incluido una serie de trámites administrativos, como son una audiencia a la concesionaria e informes de la Abogacía del Estado y el Consejo de Estado.
Una vez que esta tramitación ha concluido, el Consejo de Ministros ha dado por aprobada la resolución del contrato. A partir de ahora la vía, al igual que las ocho ya rescatadas el pasado año, pasará a ser gestionada por el Ministerio de Fomento a través de su sociedad Seittsa en una fecha aún por determinar.
En ese momento se podrá aplicar al peaje de la autopista la rebaja del 30% que las otras ocho realizaron el pasado día 15, así como la gratuidad por la noche (entre las 0.00 y las 6.00 horas).
También empezará a contar el plazo de seis meses que el Estado inicialmente tiene para calcular y pagar la Responsabilidad Patrimonial de la Administración (RPA) por la vía, el importe a abonar a sus actuales concesionarios por la inversión que realizaron en su construcción y aún no han amortizado.
No obstante, en el caso de las ocho autopistas ya rescatadas, este plazo, que vencía en los próximos días, contará con una prórroga de seis meses más.
