El candidato del PP a la presidencia de la Junta de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha prometido hoy a recuperar la zona básica de salud de Membrilla (Ciudad Real) porque la localidad se merece una sanidad de primera, frente a la intención de Page de acabar con este servicio.
Así lo ha dicho esta noche durante un mitin en este municipio, al que han asistido más de 500 personas, y en el que ha presentado a Manuel Borja como candidato del PP a la alcaldía a quien ha mostrado su apoyo y ha asegurado que repetirá en su cargo porque “ha transformado Membrilla para bien durante su mandato, gracias a su buena gestión y porque siempre defiende a su pueblo y el interés general de sus vecinos por delante de todo”.
Por ello, Núñez ha dejado claro que está deseando “apoyar a Membrilla como presidente de la Junta” para que tenga oportunidades de futuro y empezará por su situación sanitaria, porque nadie entiende que Page y la izquierda hayan querido dejar a Membrilla acabar con su zona básica de salud y limitar los servicios que tienen que recibir sus vecinos”. “Nosotros lo vamos a cambiar y con Manuel Borja como alcalde y conmigo como presidente de la Junta eliminaremos esa zonificación y Membrilla tendrá los servicios sanitarios que se merece, con una atención sanitaria de primera porque es un pueblo de primera”.
En la misma línea, Núñez ha expresado su deseo de ser presidente para mejorar la dinámica de esta tierra y dejar de ser “la segunda comunidad de España donde más se espera para una cita sanitaria. Por eso mi primera decisión como presidente será dotar a la sanidad pública regional del dinero necesario para antes de final de año haber reducido a mitad las cifras actuales de las listas de espera”.
Asimismo, ha avanzado que pretender trabajar por el reto de fijar población en lugares como Membrilla y para ello ha enumerado varias propuestas. La primera, generar empleo, y para ello cree necesario facilitar ayudas para que quien quiera incorporarse al sector agroalimentario e implantar su negocio en zonas rurales pueda hacerlo, garantizándole las infraestructuras necesarias, facilidades en la adquisición de suelo y el agua suficiente.
En este sentido ha expresado su apoyo al campo castellanomanchego, que defenderá en Toledo, en Madrid y en Bruselas, “porque con nuestra agricultura no se juega y yo estoy orgulloso de ella porque es nuestra seña de identidad y el motor económico de la región” y por eso ha mostrado su intención de poner en marcha medidas para modernizarla y facilitar la incorporación de los jóvenes y las mujeres a esta actividad.
Como otro pilar de su acción de Gobierno ha apuntado a la bajada y eliminación de impuestos, como los de sociedades, IRPF, sucesiones y donaciones y el impuesto al diésel, con el fin de convertir a Castilla-La Mancha en “un dique de contención que frene la subida de impuestos que el nuevo Gobierno de izquierdas de España va a hacer pagar a los autónomos y los agricultores españoles y castellanomanchegos”.
Por todo ello, ha proclamado que en el PP hay sitio para todos, como demuestra el hecho de que el programa electoral de la formación lo haya redactado la sociedad civil a través de 300 asociaciones y ha animado tanto a “los que han confiado en el PP siempre, como a los que han dejado de hacerlo o a los que quieren volver a confiar”, a sumarse a su proyecto, porque tiene un solo objetivo que es “mejorar la calidad de vida de los castellanomanchegos desde la libertad, la igualdad de oportunidades y la justicia”.