Estos últimos días se está hablando mucho a favor y en contra de la subida del SMI. Nosotros hemos querido explicarlo al detalle con datos objetivos.
El Real Decreto 1462/2018, de 21 diciembre (BOE 27-12-2018), fija el salario mínimo interprofesional para 2019, que regirá a partir de 1 de enero de 2019. Esto incluye a los trabajadores fijos como a los eventuales o temporeros, así como a los empleados de hogar.
El salario mínimo interprofesional para cualesquiera actividades en la agricultura, en la industria y en los servicios, sin distinción de sexo ni edad de los trabajadores, queda fijado en 30 euros/día ó 900 euros/mes ó 12.600 euros/año en 14 pagas.
Las nuevas cuantías representan un incremento del 22,30 % respecto de las vigentes en 2018.
Los nuevos costes para la empresa
Con esta subida el coste mínimo aproximado para un trabajador a jornada completa (sin tener en cuenta posibles reducciones o bonificaciones que le puedan corresponder) queda de la siguiente manera:
| T. Devengado | Cuota Obrera | Coste Patronal | TC1 | Retención | Liquido cobrar | Coste Real |
| 1.050,00 € | 67,20 € | 342,30 € | 409,50 € | 21,00 € | 961,80 € | 1.392,30 € |
(el coste de seguridad social varía dependiendo de la cuota por accidentes correspondiente a la actividad)
Consecuencias de la subida del SMI
Partimos de que esta subida del SMI afecta a unos 500.000 trabajadores aproximadamente. Lo que representa en torno al 2.5% de la población activa. Datos INE.
Algunos de los convenios beneficiados (en determinados puestos de trabajo) por esta subida son :
- Aparcamientos
- Atención a personas dependientes
- Autoescuelas
- Bingos
- Inmobiliarias
- Academias privadas
- Guarderías
- Pizzerías
Ahora que ya sabemos quiénes son los beneficiados y el aumento de costes para las empresas, veamos que ocurre en la economía:
Se especula con la pérdida de unos 10.000 puestos de trabajo que se perderán porque los empresarios no podrán hacer frente a las nóminas.
La medida más significativa para la economía española es el “aumento generalizado de los precios al consumo”.
Como las personas pasan a tener mayor poder adquisitivo, los precios tienden a elevarse automáticamente para compensar esa subida.
El portal inmobiliario Idealista ha afirmado que los precios del alquiler subirán con este aumento del SMI.
Por tanto, la subida salarial de una parte de la población se verá diluida con aumentos del IPC progresivos. Esto redistribuye la renta per cápita nacional.
Por esta razón, si más personas tienen acceso a bienes de consumo, también aumenta la demanda de empleo y, por tanto, las cotizaciones a la Seguridad Social.
Un aumento del consumo podría beneficiar a la economía reduciendo el desempleo, fomentando la creación de nuevos negocios e incluso atrayendo inversión extranjera.
Pero, por otra parte, se podría generar una mayor economía sumergida, derivada de la incapacidad de las empresas de poder asumir los costes del factor trabajo.
En conclusión, esta polémica medida enriquece a un pequeño sector de la población activa pero dificulta las labores de contratación para determinadas empresas. Queda por ver la llegada de nuevas medidas enfocadas a mejorar la actividad en las pymes, creación de empleo y apoyo a nuevos sectores o digitalización de empresas.
Una información ofrecida por: LOKINN.COM, la plataforma de zonas industriales
