Guadalajara es la provincia con la pensión media más alta de España y de toda Castilla-La Mancha con 1.038 euros frente a los 985 euros en que se sitúa el territorio nacional y a los 911 de la región castellano-manchega, un dato que CCOO atribuye al proceso de industrialización del Corredor del Henares.
Las cifras han sido desveladas por CCOO a raíz del estudio realizado por la Federación Estatal de Pensionistas y Jubilados de este sindicato junto a la Fundación Primero de Mayo sobre el año 2018, en el que se recogen distintos aspectos vinculados con estos colectivos en todo lo que tiene que ver con salud, recursos sanitarios, la brecha salarial y el envejecimiento activo.
En este Observatorio Social de las personas mayores se recoge también que, como consecuencia de esta industrialización del Corredor del Henares, la pensión media en Guadalajara se sitúa un 105% por ciento por encima de la media nacional según el responsable provincial de esta federación, Vicente Pérez, aunque desde el sindicato que cuestiona que en futuro vaya a ser así.
Un estudio que contempla también la existencia de una brecha salarial que se traduce de media a nivel nacional en unos 1.200 euros los hombres y 800 las mujeres, y en el que se observa que la esperanza de vida en Castilla-La Mancha se sitúa también en la media de España.
En Castilla-La Mancha hay hoy en día 372.900 pensiones, y si bien la pensión más alta es la de Guadalajara, en el resto de las provincias apenas llegan a los 900 euros, siendo Albacete y Cuenca la que tienen peor pensión según ha precisado por su parte, el secretario de la Unión Regional de CCOO, Juan Navalón.
Por todo ello, desde CCOO han incidido en la importancia de mantener una buena base de cotización, algo que en opinión de Navalón se constata en Guadalajara, donde hay mucho tejido industrial pero donde también cree que influye la creciente presencia del sindicato en las empresas grandes, donde «se consiguen buenos convenios y salarios, y no es casualidad».
No obstante, a preguntas de los periodistas, desde CCOO ha reconocido que este tejido industrial que había en Guadalajara y que ha motivado estas pensiones hoy, ha cambiado y que el futuro pensionista y jubilado no cobrará la misma pensión, como tampoco en otras provincias.
En todo caso, desde CCOO esperan que se acabe con el fraude de contratar por cuatro horas a los trabajadores y que trabajen ocho; y por eso esperan que la nueva ley de horarios haga su efecto y que las personas coticen por el tiempo real de trabajo que realicen.
En Guadalajara hay 173 con menos de 100 habitantes; el 75% de las personas tienen a partir de 65 años y de ellos el 25% son dependientes sin medios para acceder fácilmente a ella, de ahí que desde CCOO hayan reclamado más medios aun reconociendo que en la región se han incrementado pero creen que no han llegado al medio rural.
Una provincia también en la que hay más de 9.500 pensionistas que han tenido que completar los mínimos en sus pensiones, la mayoría son mujeres. Un colectivo que sufre una situación más precaria y que se sitúa la tercera provincia por la cola con menos población mayor de 65 años, con un 15,9% de personas, por detrás de Almería y Las Palmas.
Otro dato que ha desvelado este estudio es la diferencia importante entre plazas públicas y privadas de residencias para mayores que en el caso de Castilla-La Mancha es de 9.731 públicas y 16.593 privadas. En el caso de Guadalajara hoy hay 1.360 plazas públicas y 2.649 privadas, unas cifras que hay revertir.
Por su parte, el secretario de la Federación Estatal de Pensionistas y Jubilados de CCOO, Julián Gutiérrez, ha querido hacer también hincapié en que si bien es cierto que las personas mayores requieren un gasto, no lo es menos que de cada euro que se invierte en ellos, a través del INSERSO, el Estado recupera 1,5 euros por los puestos de trabajo que se crean.
Por último, la secretaria de Organización de CCOO en Guadalajara, Laura Gil, ha querido resaltar del estudio en relación específica a la provincia alcarreña la prevalencia de un perfil que es mujer, que vive sola y que reside en el medio rural, un dato que para esta responsable exige un reforzamiento de los servicios en los pueblos para las personas de la tercera edad.