sábado, 16 noviembre, 2024

Más de 800 personas se suman en Manzanares a la fiesta solidaria de la bicicleta 2019

Los más pequeños por la mañana y el resto de la ciudadanía por la tarde disfrutaron de un agradable paseo por las calles de Manzanares

Organizada por el Área de Deportes del Ayuntamiento de Manzanares, la fiesta solidaria de la bicicleta volvió a reunir a más de 800 personas de todas las edades en la jornada del 6 de diciembre. Los jóvenes menores de 7 años disfrutaron de su paseo por la mañana, mientras que los mayores lo hicieron por la tarde. Borja y Benito fueron, respectivamente, los ganadores de las bicicletas que se sortearon al finalizar la marcha. Antes, Cruz Roja Manzanares recogió los alimentos no perecederos donados por los participantes.

El 6 de diciembre es un día muy especial en España, ya que se conmemora el aniversario de nuestra Constitución. Sin embargo, en Manzanares esa fecha también está señalada en rojo en el calendario. El motivo, se celebra la tradicional fiesta solidaria de la bicicleta. Una jornada festiva en la que grandes y pequeños se lo pasan en grande dando un paseo sobre ruedas por las calles de la localidad.

Torre de Gazate Airén

Manuel José Palacios, concejal de Deportes, agradeció el esfuerzo realizado por los efectivos de la Policía Local, los voluntarios de Protección Civil y el personal del Área de Deportes para que las dos marchas se desarrollaran sin incidencias. “Ha hecho un día estupendo y la gente ha respondido: han participado más de 200 niños y niñas por la mañana, y más de 600 personas por la tarde. Este evento congrega a mucha gente y sigue siendo una de nuestras apuestas por las actividades deportivas a nivel aficionado“. El edil se mostró muy feliz “por ver cómo se fomenta el deporte entre los más pequeños” con la fiesta solidaria de la bicicleta, una cita por la que seguir apostando, ya que es muy bonito ver en la salida a familias enteras que vienen a pasar una bonita jornada”.

Como es habitual, la concentración de ciclistas tuvo lugar en la estación de autobuses. Allí también estaban presentes los voluntarios y voluntarias de Cruz Roja Manzanares, que recogieron los alimentos no perecederos aportados por los participantes. “Garbanzos, arroz, leche, habichuelas… Se puede traer de todo. Las personas que más lo necesitan, sobre todo ahora que se acerca la Navidad, lo agradecen mucho”, indicaron los voluntarios, que dieron las gracias al pueblo de Manzanares por su colaboración.

A las 16 horas comenzó esta marcha de carácter no competitivo, que a lo largo de unos seis kilómetros fue recorriendo numerosos barrios de Manzanares. Durante el trayecto se efectuaron varias paradas para reagrupar a un pelotón que llegó a la meta situada en la Plaza de la Constitución poco antes de las cinco de la tarde. Fue entonces cuando se produjo otro de los momentos más esperados por los participantes, el sorteo de la bicicleta, que en esta ocasión fue a parar a manos de Benito. “Estoy muy feliz porque es la primera vez en mi vida que me toca algo”, confesó. Y con la entrega de mochilas como regalo a todos los participantes finalizó la edición de 2019 de la fiesta solidaria de la bicicleta.

Fiesta solidaria de la bicicleta para peques

Los más pequeños también disfrutaron por la mañana de un paseo a bordo de sus bicicletas. Aunque no fue el único vehículo que pudo verse, ya que también hubo triciclos, patinetes e incluso hoverboards. La línea de salida estuvo ubicada a las puertas del recinto ferial, hasta donde se desplazaron los jóvenes menores de 7 años acompañados por sus familias, todos con rostros desbordantes de alegría. Y es que la temperatura que se registró en Manzanares contribuyó a que el paseo fuera muy agradable.

Los pequeños partieron de Fercam, atravesaron los Paseos Príncipe de Asturias y enfilaron la calle Cárcel hasta llegar a la Plaza de la Constitución, donde se efectuó el sorteo de una bicicleta entre los alrededor de doscientos participantes. El agraciado fue Borja, desbordante de alegría, que confesó que le hacía mucha ilusión recibir la bicicleta “porque si se me rompe la mía, ya tengo otra de reserva”. Y aunque Borja regresó a su hogar con dos bicicletas, nadie se fue de vacío porque todos los niños y niñas recibieron una mochila como regalo.

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