Componentes del Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Villarrobledo, en el marco de la operación “STREAMVILLA”, han detenido a dos personas de 25 y 45 años de edad, como presuntas autoras de dos delitos de robo con fuerza cometidos en un taller mecánico de la localidad albacetense de Barrax, por el procedimiento del butrón.
Tras estas detenciones, la Benemérita consiguió detener a otras tres personas como presuntas autoras de un delito de falsedad documental al dar de alta tarjetas SIM, de diferentes compañías telefónicas, con datos inventados, y que posteriormente, para dificultar una posible investigación, utilizaban sus usuarios cuando cometían delitos contra el patrimonio.
Investigaciones
En el mes de mayo de 2017, la Guardia Civil de Villarrobledo comenzó a investigar dos robos, cometidos en un taller mecánico de Barrax, denunciados por el propietario del establecimiento ante la Guardia Civil de La Roda.
Los agentes de la Guardia Civil que realizaron las inspecciones oculares se encontraron, en ambos robos, con que los autores de los hechos habían practicado en una de las paredes del local un orificio, a modo de butrón, por donde entraron y salieron. En estos dos hechos delictivos, los autores sustrajeron varios teléfonos móviles, ordenadores portátiles, abundante herramienta y una maquina de autodiagnosis de motores, efectos valorados por su propietario en 3.500 €.
Tras las primeras gestiones, los investigadores de la Guardia Civil consiguieron localizar en una conocida página web de compra y venta de artículos de segunda mano algunos de los objetos sustraídos en los robos.
El alta de estos anuncios se realizó desde distintos locutorios de Madrid con el fin de garantizar su anonimato utilizando para la inserción de los anuncios líneas de telefonía móvil de prepago, a nombre de personas de nacionalidad china, todas ellas ficticias dificultando de este modo su verdadera identificación y localización.
En estas pesquisas la Guardia Civil localizó y recuperó un teléfono móvil sustraído en uno de los robos, consiguiendo identificar, localizar y detener a la persona que lo estaba utilizando, localizando posteriormente a una segunda que había utilizado otro terminal móvil, igualmente sustraído, y que fue enviado a Bangladesh para su venta.
Una segunda línea de investigación
Tras la detención de estas personas la Guardia Civil abrió otra línea de investigación relacionada con los dos robos esclarecidos, consiguiendo localizar en Madrid las dos tiendas de telefonía móvil desde donde se habían activado las líneas de los teléfonos móviles, sustraídos y posteriormente recuperados, que estaban utilizando los autores de los robos.
En estos dos establecimientos se intervinieron 500 tarjetas SIM de diferentes operadoras de telefonía móvil, encontrándose todas ellas activas y dadas de alta a nombre de personas de diferentes nacionalidades, en su mayoría china.
Por tales hechos fueron detenidas tres personas, de 33, 43 y 45 años, que se dedicaban a dar de alta esta tarjetas SIM, con datos que no se correspondían con ninguna persona física, contraviniendo la legislación actual.