Miles de cazadores de Castilla-La Mancha — han participado este domingo en las concentraciones convocadas en las cinco capitales de la región por la Federación Española de Caza para exigir «respeto» y el «cese de insultos» a una actividad que «genera riqueza» y contribuye a fijar la población en el medi8.000 según la organización y 4.000 según la Delegación del Gobiernoo rural.
Una de las concentraciones más concurridas ha sido la de Ciudad Real, donde los cazadores -2.000 según la organización y 1.000 según fuentes policiales- han reclamado «libertad» para practicar la actividad cinegética «que es una actividad legal y autorizada» que representa, además, un modo de vida en el medio rural, a cuya conservación y dinamización socioeconómica contribuye.
Por este motivo, el delegado de la Federación Española de Caza en Ciudad Real, Manuel Aranda, ha exigido «a los dos principales partidos políticos, ahora tres» que alcancen delegado de la Federación Española de Caza en Ciudad Real, Manuel Aranda acuerdos a la hora de elaborar leyes que afectan al sector cinegético para evitar «caer en manos de grupos anticaza ante los que tengan que bajarse los pantalones».
En este sentido, Aranda ha recordado que los cazadores también «votan» por lo que ha pedido a partidos y administraciones «que tomen nota, porque si no la tomaremos nosotros» y ha añadido que «nosotros nunca diremos a quién hay que votar, pero sí a quien no hay que votar».
MATAR AL MEDIO RURAL
El delegado de la Federación Española de Caza en Ciudad Real ha reivindicado la importancia que la actividad cinegética tiene para los pueblos de Castilla-La Mancha y Ciudad Real hasta el punto de que «quitar la caza sería matar a muchos pueblos».
«Estamos hartos de que nos machaquen con insultos y amenazas, que la palabra más bonita que nos dicen es asesinos. Somos cazadores, no asesinos y la caza supone importantes ingresos para los pueblos de muchas comarcas de Ciudad Real al tiempo que fijan la población» ha reivindicado Aranda, quién ha agradecido el apoyo a la concentración que se ha repetido en todas las capitales de Castilla-La Mancha de asociaciones como ATICA, APROCA, Afammer, Asaja o Amfar.
La concentración, que ha concluido con un aplaudido «viva la caza», ha contado con la lectura del mismo manifiesto en todas las capitales de Castilla-La Mancha y en el que se ha reivindicado la importancia social, económica y cultural de la caza, «un colectivo grande, activo y unido que practica una actividad que genera empleo y riqueza. Por eso pedimos respeto, vivir en paz y libertad», ha reivindicado el cazador que ha leído el texto, Santiago Ballesteros.
Por provincias, y según datos de la organización, en Ciudad Real, Toledo y Albacete han participado unos 2.000 cazadores en cada concentración, mientras que en Cuenca y Guadalajara han sido unos 1.000.