El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y el afamado coleccionista de arte Roberto Polo, han procedido este miércoles a la firma del protocolo por el cual el experto cederá un total de 445 obras de arte que irán a parar al Convento de Santa Fe de Toledo y a la Casa Zavala de Cuenca en febrero de 2019, espacios museísticos que se verán ampliados en 2023 con la antigua biblioteca del Miradero en Toledo y el Archivo Histórico Provincial de Cuenca.
Las obras, que aglutinan un valor de 368 millones de euros, permanecerán 15 años en Castilla-La Mancha, con la opción de que a la finalización el coleccionista pueda donar algunas de ellas. Para su gestión se pondrá en marcha la Fundación Roberto Polo.
En el acto protocolario en que el que ha quedado plasmada la firma, el consejero de Educación, Cultura y Deportes del Gobierno castellano-manchego, Ángel Felpeto, ha explicado que no se trata de una «relación contractual».
«La esencia del pasado de Castilla-La Mancha la unimos ahora a su presente y a su futuro. Han sido muchos meses de trabajo necesarios para llegar hasta aquí, y a partir de ahora damos los primeros pasos para albergar obras desde el siglo XIX hasta el XXI», ha explicado.
No más tarde del 31 de diciembre de 2023 deberá estar operativo el Archivo Histórico Provincial de Cuenca, fecha en la que debería ampliarse el espacio expositivo de la biblioteca del Miradero de la capital regional.
Mientras se llevan a cabo los trámites administrativos para dar luz verde a la nueva Fundación Roberto Polo, la Junta encomienda la realización de actividades necesarias a la Fundación Impulsa. Será el Gobierno regional quien se haga cargo de la custodia y recepción de las obras.
«Estamos a punto de abrir una puerta que lleva al progreso de esta tierra. No cabe más que deicr. Felicidades a todos los castellano-manchegos», ha agregado Felpeto.
POLO: «C-LM SERÁ ADALID DE LA VANGUARDIA Y DEL ARTE CONTEMPORÁNEO»
El coleccionista, visiblemente emocionado, ha iniciado su discurso con palabras de agradecimiento para el Gobierno autonómico por el «esfuerzo» realizado para albergar esta colección, considerando que la Comunidad Autónoma «se convertirá en adalid de la vanguardia y del arte contemporáneo».
«Cuando me preguntan por el valor de mi colección, siempre digo que reside en la pasión y en el rigor científico, no en el dinero. No es sólo acopio, es creación, es escritura y reescritura de la historia del arte», ha dicho Polo.
Ha puesto el acento además en lo «feliz» que le hace que Castilla-La Mancha sea el destino de esta gran colección, algo que hay que agradecer «al buen hacer del presidente», agradecimiento que ha hecho extensivo al vicepresidente primero, José Luis Martínez Guijarro, al consejero de Cultura, Ángel Felpeto, y a su viceconsejero, Jesús Carrascosa.
Este hito, en opinión de Polo, es «similar» a la apuesta que hace 50 años se realizó en Cuenca con la puesta en marcha del Museo de Arte Abstracto.
PAGE AGRADECE LA «DETERMINACIÓN» DEL COLECCIONISTA
El presidente autonómico, Emiiliano García-Page, ha tomado la palabra para agradecer la «determinación» de Roberto Polo por traer a Castilla-La Mancha su colección.
«Le debemos mucho a esas personas que se han tomado el interés de acumular y querer provocar una colección. No es tan habitual, y una parte fundamental de la historia que se puede percibir en el mundo tiene que ver con el esfuerzo y decisión de personas e instituciones que decidieron acumular arte para el futuro», ha manifestado García-Page.
Hoy es para el presidente regional «un día para celebrar», tras lo que ha bromeado con el extremo de que el papeleo para poder darle forma jurídica a esta cesión «podría ser una obra de arte más».
Esta inversión será «una atracción» cultural para «una sociedad que reclama cultura» aunque «no siempre está dispuesta a pagar por ella».
Ha mostrado su alegría por que Toledo y Cuenca sean los destinos y en espacios ya existentes, ya que Polo podría haber decidido instalarla en un edificio exclusivo para su colección. Pero, en cambio, «va a parar a ciudades enciclopédicas».
«Confiamos mucho no sólo en el público especializado que va a venir, sino en la atracción progresiva de turistas que se interesarán por la aportación de esa colección magnífica», ha confiado. Aunque Toledo y Cuenca «tienen mucho» que ofrecer, nunca «es suficiente».
Para García-Page, desde hoy «Castilla-La Mancha tiene una deuda» con la generosidad de Roberto Polo, palabras que ha recogido el coleccionista para dejar claro que cada una de las sedes museísticas «tienen su identidad propia».
«ESTO CIERRA UN CÍRCULO»
Roberto Polo ha asegurado que con la llegada de su colección «se cierra un círculo» en la historia de Castilla-La Mancha y de España y su relación con el arte, desde que hace 500 años llegara el arte flamenco.
«No será un museo en el que el visitante vea a los mismos artistas que ven en el resto de museos de arte contemporáneo. Yo nunca he seguido fórmulas y voy a ser fiel a mí mismo», ha adelantado.