Desde que comenzara a realizarse en el Hospital Universitario de Guadalajara a finales de 2009 el servicio de Hematología en este centro hospitalario, se han llevado a cabo 84 autotrasplantes en pacientes con enfermedades oncohematológicas.
Durante estos años, el programa ha incluido a un total de 98 pacientes, con una media de diez a quince pacientes al año con enfermedades como linfomas y mielomas, fundamentalmente, y de estos 98 pacientes se han trasplantado 84.
El Hospital de Guadalajara es, junto con el Complejo Hospitalario de Albacete, uno de los dos centros castellano-manchegos donde está implantado el programa de trasplante autólogo de progenitores hematopoyéticos. Atiende, además de pacientes de Guadalajara, a pacientes procedentes de Cuenca, del Hospital Mancha Centro de Alcázar de San Juan y, más recientemente, del Hospital de Ciudad Real.
El trasplante autólogo o autotrasplante de progenitores hematopoyéticos es el procedimiento que se aplica en el tratamiento de enfermedades oncohematológicas quimiosensibles que suponen la administración de altas dosis de quimioterapia que eliminan todas las células tumorales pero “conllevan una aplasia prolongada irreversible de médula ósea incompatible con la vida”, ha explicado la doctora Dolores Morales.
Por este motivo, días antes de la administración de la quimioterapia se recogen células progenitoras del propio paciente (las encargadas de producir los componentes de la sangre), mediante una leucoaféresis. Estas células se guardan congeladas para ser infundidas después del tratamiento con quimioterapia con el fin de recuperar la hematopoyesis (proceso de formación nuevas células sanguíneas).
Las células salen de la médula ósea a la sangre periférica mediante inyecciones subcutáneas de G-CSF (factor estimulante de colonias granulocíticas) y se recogen con una máquina de aféresis, que permite separar por centrifugación los leucocitos mononucleares, entre los que se incluyen las células progenitoras, mientras que el resto de componentes sanguíneos retornan al paciente en un proceso continuo. En una o dos sesiones se consigue la cantidad suficiente de células que se le infundirán al paciente a través de un catéter central, una vez concluya su tratamiento de quimioterapia.
I Jornada Medicina Transfusional
Precisamente, la obtención de células progenitoras hematopoyéticas de sangre periférica para autotrasplante será uno de los temas a abordar durante la celebración, el próximo 23 de noviembre, de la I Jornada de Medicina Transfusional de Castilla-La Mancha, con una ponencia que expondrá la doctora Dolores Morales.
La jornada, organizada por la Red de Hemodonación, Hemoterapia y Hemovigilancia de Castilla-La Mancha, se celebrará en Toledo e irá dirigida no sólo a hematólogos sino a todos los profesionales sanitarios interesados en los procesos de donación y transfusión.
Entre otros temas, se abordarán los avances en la prevención de la enfermedad hemolítica del recién nacido, la transfusión masiva, los nuevos tratamientos en hemofilia, la planificación de colectas de donación de sangre o la importancia de la lesión por almacenamiento en los componentes sanguíneos.