La Federación de Municipios y Provincias de Castilla-La Mancha (FEMP) de Castilla-La Mancha ha mostrado su repulsa a los atentados cometidos este jueves en Barcelona y Cambrils (Tarragona), «un acto de extrema crueldad, que pone de manifiesto la sinrazón y la ausencia de cualquier valor humano de quienes los cometen o los inspiran». No obstante, han sostenido que aunque estos hechos «causan mucho dolor, no rompen ni destruyen la democracia».
Es por ello, que ha instado a los ayuntamientos de la región a convocar a sus vecinos a las 12.00 horas y guardar cinco minutos de silencio frente a las casas consistoriales.
Del mismo modo, han invitado a que durante tres días los consistorios mantengan las banderas a media asta en señal de luto, según ha señalado la federación en una nota de prensa en la que ha mostrado sus condolencias a las familias y el deseo de recuperación de los heridos.
También, la presidenta de la FEMP en la Comunidad Autónoma, Mayte Fernández, ha enviado su solidaridad a las alcaldesas de Barcelona y de Cambrils, Ada Colau y Camí Mendoza, respectivamente, así como a sus ayuntamientos, al tiempo que les brinda su apoyo y solidaridad.
